El viaje a Ladakh nos ha deparado multitud de sorpresas, entre ellas los inimaginables paisajes que hemos podido ver en nuestro recorrido desde Manali a Leh. Nada más llegar al valle del Indo nos topamos con una de las estampas más bellas de Ladakh, el monasterio de Thiksey. Desde allí viajamos a Hemis para asombrarnos con el festival budista de Tse-Che lleno de colorido, asombrosas danzas y cánticos. Ahora, tras haber descansado en Leh, toca poner rumbo a otro de los monasterios más conocidos y bellos de Ladakh, el monasterio de Lamayuru. Para ello alquilamos un coche con conductor en Leh (directamente un taxista) que en una ruta de 2 días nos llevará a:
- Monasterio de Phyang
- Antigua ciudad de Basgo
- Monasterio de Likir
- Monasterio de Alchi
- Monasterio de Rizong
- Monasterio de Lamayuru

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1. Monasterio de Phyang
El primer gompa que visitamos en nuestra ruta hacia Lamayuru es un bonito templo en el que apenas hay visitantes. De hecho son los monjes jóvenes los que nos acompañan y van abriendo las salas para nosotros.
2. Basgo
Basgo, la antigua capital de Ladakh, parece en la lejanía un conjunto de ruinas sin ningún interés. Al acercarnos y llegar hasta arriba nos encontramos 3 gompas pequeños y algunos restos de murallas.
Entramos en el gompa más grande, que está restaurado y es magnífico gracias a una enorme estatua de Maitreya, el «buda del futuro», y a las bellas pinturas que cubren las paredes y que están limpiando durante nuestra visita. Seguimos hacia el segundo gompa, más pequeño y que cuenta con una interesante librería. No entramos en el último de los gompas, por estar cerrado.

Basgo en Ladakh

paisaje de Ladakh
3. Monasterio de Likir
Nos aproximamos a Likir y nos quedamos asombrados ante la belleza del paraje, montañas nevadas al fondo y el monasterio con sus colores blancos, rojos y negros. Desde fuera parece muy grande y al acercarnos constatamos que hay mucha actividad, estando repleto de monjes de todas las edades, sobre todo jóvenes y niños.
Paseamos por el gompa y visitamos 2 salas de oración y un museo que posee piezas muy antiguas, como un thangka de 500 años. Los thangkas o tangkas son banderas o tapices budistas bordados o pintados que muchas veces representan la rueda de la vida, deidades budistas o escenas de la vida de Buda. Pero los thangkas no son un objeto de decoración, sino algo espiritual, por ello hay thangkas de gran tamaño que son extendidos en las fachadas de los monasterios con ocasión de alguna ceremonia especial.
Nos interesamos por las oraciones del amanecer, para ver si es posible asistir, pero nos dicen que es ¡¡ a las 3 de la mañana !!. Desistimos y continuamos nuestro viaje.

Monasterio de Likir

Monasterio de Likir

Dentro de Likir

Vistas desde el monasterio
4. Monasterio de Alchi
Alchi nos sorprende porque es uno de los pocos gompas que no está en lo alto de una montaña. Situado casi en un llano, este monasterio fundado en el siglo X, está formado por un conjunto de construcciones de forma cúbica. Nos parece un poco feo desde fuera, pero nuestra primera impresión cambia cuando entramos dentro del gompa y empezamos a descubrir las maravillas que esconden esos “cubos” blancos.
El templo Sum-tsek posee una espectacular puerta exterior labrada de madera y su interior está decorado con maravillosas pinturas de siglo XI y dos Budas de plata.
Quizás Alchi sea el monasterio con las mejores pinturas de todo Ladakh, además podemos observarlas en silencio, con la luz de nuestra linterna y sin más visitantes alrededor. Antes de irnos vemos con asombro un mandala de arena que nos deja boquiabiertos por su belleza y que nos hace pensar en la cantidad de horas que habrán pasado los monjes creando esa obra de arte hecha para ser destruida.

Ruedas de oración

Velas en templo budista
5. Rizong
Este monasterio está situado al fondo de un valle empedrado, desértico, con gleras de piedra que parecen ir a desprenderse. Decenas de construcciones de forma cúbica, de colores blanco y rojo tapizan todo el fondo del valle.
Encontramos a un joven monje, de unos 10 años, que combina su vestimenta budista anaranjada con una gorra de beisbol y que nos sirve de guía por todo el complejo. Corre delante nuestro sin sentir la fatiga que sentimos nosotros por la altitud. Todos los templos que estamos visitando se encuentran a más de 3000 metros de altura, y se nota cuando intentamos andar más deprisa de lo normal, o al subir las empinadas cuestas que llevan hasta los gompas.
El monje nos enseña la sala de oración, una sala de reuniones y un mandala. Y después nos mete en la cocina donde un sonriente cocinero nos invita a champa, el típico té tibetano hecho con mantequilla de yak. Una bebida grasienta, fuerte, con color de agua sucia que beben a todas horas.
Nos despedimos del monasterio de Rizong que nos ha hecho sentirnos como en casa y seguimos camino hasta nuestro destino final de esta ruta, el monasterio de Lamayuru.

Monasterio de Rizong con nuestro monje/guía improvisado

Monasterio de Rizong
6. Lamayuru
Ubicado en un enclave espectacular, en lo alto de la colina y con unas vistas que quitan el aliento… montañas al fondo, un antiguo lago ya seco y a lo lejos multitud de fértiles campos verdes y amarillos. El monasterio de Lamayuru es uno de los más antiguos de Ladakh y en él se celebra un festival budista similar al que vimos en Hemis. Subimos hasta el gompa para visitar su interior, que nos decepciona un poco ya que sus salas de oración y de reunión no son tan espectaculares como lo es su privilegiada situación.
Preguntamos por la puja matinal, pero nos dicen que se hace a puerta cerrada a las 4 de la mañana.
La ruta que nos ha llevado hasta Lamayuru toca a su fin, ahora solo queda regresar a Leh recorriendo la misma carretera pero esta vez con una sola parada, el monasterio de Spituk. Allí nos encontramos con la mayor sorpresa del viaje a Ladakh, una ceremonia especial de fin de mandala que dura cuatro días y que tenemos la suerte de ver, vivir y compartir con los monjes, como ya te contamos en otro artículo.

Monasterio o gompa de Lamayuru

Vistas del valle desde el monasterio

Ruedas de oración budista

Monasterio gompa de Lamayuru
Me gustaría hacer este viaje cuál es la mejor temporada del año,para disfrutarla,tenéis pensado hacer un tour para este año? gracias
La mejor época es julio, agosto o septiembre.
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