Qué ver en Leh, capital de Ladakh

Leh, la pequeña capital de Ladakh, es el punto de partida para muchas de las visitas que pueden hacerse en un viaje por esta remota región de la India. Después de una ruta espectacular a través de la cordillera del Himalaya llegamos a Leh y desde allí organizamos el resto de nuestro recorrido por el valle. Para ello alquilamos varios coches con conductor (directamente taxistas de Leh) para hacer distintas rutas, una de ellas nos llevó hasta el aislado y remoto valle de Nubra, y otra hasta uno de los templos más alejados del valle de Ladakh, el monasterio de Lamayuru. Pero además, Leh es un agradable pueblo con algunos lugares interesantes que visitar como:

Palacio de Leh
Namgyal Tsemo gompa
Gompa Sankar
Shanti Stupa

Leh

Leh, capital de Ladakh

Paisaje de Ladakh

Qué ver en Leh

1.- Palacio de Leh

La imagen del palacio de Leh, con sus 9 pisos de altura y su estilo similar al palacio de Potala en el Tibet es espectacular desde la lejanía. Este palacio real fue construido en el siglo XVII por el rey Sengge Namgyal y abandonado hace 200 años… y esos años de abandono se notan. Es cierto que hemos leído algunos artículos que hablan de la lenta restauración del palacio, pero cuando nosotros lo visitamos estaba por completo en ruinas.

Para llegar hasta el palacio de Leh hay que recorrer el barrio antiguo, con la mayoría de sus casas de adobe y calles sin asfaltar, que recorremos sin apenas encontrarnos con nadie. Al llegar al palacio dudamos si entrar ya que parece que el edificio no está bien conservado, pero ya que hemos llegado hasta aquí pagamos la cara entrada y accedemos al interior.

Lo que encontramos son salas oscuras, en ruinas, con agujeros peligrosos para el visitante y pasillos en los que no entra apenas luz. Tenemos que guiarnos con las linternas que afortunadamente llevamos con nosotros para poder salir de este laberinto sucio y sin nada de interés. Ojalá en el futuro la restauración sea una realidad y el palacio de Leh pueda recuperar parte del esplendor que debió tener siglos atrás.

Palacio de Leh

2.- Namgyal Tsemo Gompa

Esta típica construcción de Ladakh puede verse en lo alto de una pequeña colina rocosa frente al palacio de Leh. Una ubicación privilegiada a la que se accede tras una dura subida. Para decepción nuestra, cuando llegamos al gompa, nos encontramos éste cerrado. Damos varias vueltas intentando encontrar a alguien que pueda abrirnos las puertas del monasterio pero no tenemos éxito.

No podemos ver el interior del monasterio Namgyal Tsemo fundado en 1430 y que además de una estatua de Buda Maitreya de 3 pisos, posee una sala de oración con frescos y manuscritos antiguos. Pero sí que podemos disfrutar del magnífico paisaje de los alrededores y de las vistas sobre la parte antigua de Leh.

Subiendo al Tsemo gompa

Tsemo gompa

Tsemo Gompa

3.- Gompa Sankar

Este gompa no es fascinante ni destaca por nada especial, pero lo que merece la pena es recorrer los 2 kilómetros que le separan del centro de Leh, y que se convierten en un agradable y relajado paseo.

Paisaje de Ladakh

4.- Stupa Shanti

Esta estupa está situada a 2 kilómetros del centro de Leh, y para llegar hasta ella hay que subir 600 escaleras, que no serían muchas en condiciones normales, pero que debido a la altitud se convierten en un reto. Subir tantos escalones estando a más de 3500 metros no es tarea fácil.

Después de la dura subida, nos encontramos con un paisaje que compensa todo el esfuerzo. Unas vistas magníficas, con montañas cubiertas de nieve al fondo, el verde oasis de Leh lleno de árboles, el palacio real y el Tsemo gompa justo enfrente. Para completar esta estampa mágica con la que despedimos nuestro viaje a Ladakh, todo está iluminado con los dorados colores del atardecer.

Tsemo gompa al atardecer