La cascada Skógafoss es, sin duda, una de las cascadas más famosas y bonitas de Islandia. Sin embargo y a pesar de ser espectacular, la excursión que sale de la parte alta de la Skógafoss y permite ver otras 9 cascadas del río Skógá es poco conocida. Un trekking muy fácil que discurre por un paisaje sublime y que sin duda te recomendamos hacer una vez termines de ver la cascada Skógafoss.
Cascada Skógafoss
La cascada Skógafoss es uno de los clásicos que no pueden faltar en un viaje por Islandia. Es el último salto de agua del río Skógá antes de desembocar en el Océano Atlántico. Una caída de agua de 69 metros de altura y 30 metros de ancho que como un velo se desploma sobre un lecho pedregoso de color negro. Sin duda un bonito contraste entre el blanco del agua, el negro de las piedras y el verde de la vegetación cercana que todo lo cubre en Islandia.
Llegar a la cascada Skógafoss es muy fácil ya que está pegada a la carretera 1 (Ring Road). Además existe un aparcamiento a escasos metros por lo que es fácilmente accesible.
Tras acercarnos a ver la base de la cascada y hacer las correspondientes fotos, nos dirigimos hacia el mirador de la parte alta de la cascada. Para ello tomamos el sendero que sale por la parte derecha de la ladera y que en escasos metros se continua con un entramado de escaleras metálicas. Son casi 400 escalones que terminan en un pequeño mirador sobre la cabecera de la cascada Skógafoss. A un lado queda el llano del que venimos y al otro lado una extensión verde con varias colinas en el fondo.
Trekking por las últimas cascadas del río Skógá
La mayoría de los viajeros, sobre todo si viajan con poco tiempo, se limitan a ver la cascada Skógafoss desde la base y con un poco de suerte suben a la parte alta. Nosotros os recomendamos hacer una caminata por el sendero que comenzando en el mirador de Skógafoss discurre junto al río Skógá.
Un trekking sencillo, con 200 metros de desnivel y perfectamente señalizado. Un paseo de 2,5 kilómetros (por sentido) que completamos en 2 horas y que nos permitió ver las nueve cascadas. Por cierto cascadas de nombre complejo que no merece la pena memorizar (Hestavadsfoss, Femri-Fellsfoss, Skálabrekkufoss….).
Hay cascadas de todo tipo. Unas son mucho más anchas que altas como Hestavadsfoss o Rollutorfufoss, otras son altas y estrechas. Algunas están en mitad de un llano verde, otras discurren por un cañón cubierto de hierba.
Pero no solo las cataratas son bonitas. El entorno es espectacular, con un cañón por donde discurre el río. Un paisaje donde el verde de la hierba ocupa cada rincón. Unas montañas verdosas que dejan paso a altas montañas nevadas al final del recorrido. Unos pequeños chorros de agua con fondo anaranjado que se unen al discurrir del río Skógá. Sin duda un trekking imprescindible.

Trekking por las cascadas río Skoga (aquí en GoogleMaps)
Las últimas 10 cascadas del río Skógá
A título informativo, porque no tiene sentido aprenderse los nombres, estas son las 10 cascadas que podrás ver durante la caminata.
- Skógafoss, es la última cascada del rio pero la más cercana al aparcamiento.
- Hestavadsfoss. La primera que encontramos en nuestra caminata. El río parece abrirse en este punto del verde paisaje para formar una cascada muy ancha (56 metros) aunque de poca altura (9 metros).
- Fosstorfufoss. Menos ancha y con una caída menos limpia que la anterior pero igualmente bonita.
- Steinbogafoss
- Otra cascada sin nombre.
- Femri-Fellsfoss. Aproximadamente a 1,6 km de Skógafoss. Una cascada en un lugar donde el río Skógá hace un quiebro, como queriendo engañar al curso natural de las aguas.
- Inni-Fellsfoss. A unos 150 metros de Femri-Fellsfoss
- Rollutorfufoss. A unos 100 metros de Inni-Fellfoss. De nuevo una cascada más ancha (37m) que ancha (5m) pero que nuevamente hace las deliciosas de los fotógrafos.
- Skálabrekkufoss. A 2.2 km de Skógafoss y 350 metros de la anterior. Es una catarata de 43 metros de altura pero muy distinta al resto, al estar completamente rodeada por paredes.
- Kaefufoss. Coordenadas. 63.549506, -19.49465
En ese punto, a 2,5 kilómetros del mirador de la cascada Skógafoss, damos la vuelta. Hay más cascadas a lo largo del río pero ya el camino y el paisaje cambian considerablemente.
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