Si hay algo distintivo de Kashan, y motivo más que suficiente para incluirlo en el itinerario de un viaje a Irán, son las casas tradicionales construidas con adobe. Pero ¿qué tienen de especial estas construcciones?, ¿qué casas tradicionales de Kashan son más interesantes?, y ¿cuales es recomendable visitar?
La parte antigua de Kashan es una maraña de estrechos callejones con construcciones de adobe sobre las que se abren paso los badgirs o torres de ventilación, cuyo objetivo es recoger el aire y conducirlo al interior de la vivienda tras haberlo enfriado en un curioso sistema de aire acondicionado ecológico y gratis.
En esta parte antigua de Kashan (porque en la parte moderna encontramos los mismo edificios de ladrillo que puedes ver en cualquier parte del mundo) las casas se caracterizan por ser construidas en profundidad. Es decir, cuando paseamos por las calles solo vemos una tapia de adobe de unos tres metros de altura, y parece que por dentro solo tienen una planta. Sin embargo, cuando nos adentramos en ellas nos dimos cuenta de que accedemos por la parte alta de la casa, y tenemos que bajar escaleras para llegar al resto de plantas de la vivienda. Una forma fácil de construir que además protege mejor del calor.
En Kashan existen decenas de casas tradicionales construidas en la época Qajar (siglo XIX), siguiendo todas ellas un esquema similar. Constan de uno o varios patios rectangulares rodeados de varias plantas de corredores, pasajes, salas y cúpulas decorativas, además del badgir. En general las paredes de las casas están finamente decoradas con estucos, grabados en escayola o delicadas pinturas.
Algunas de estas casas tradicionales están en ruinas, otras a medio remodelar, algunas han sido convertidas en alojamientos y las más grandes e impresionantes se han conservado y reconstruido para ser visitadas. De entre esas casas que pueden visitarse nosotros entramos en las tres más grandes y conocidas, las casas Boroujerdi, Tabatabei y Abbasian. Las tres están cerca y creemos que merecen la pena.
Khan-e Boroujerdi o casa Boroujerdi
Esta casa de la segunda mitad siglo XIX, se tardó en construir casi 18 años y perteneció al comerciante Haji Mehdi Boroujerdi. Diseñada por el mismo arquitecto que la casa Tabatabei es la menor de las tres que visitamos, aunque tiene 3500 m2, y destaca por la gran calidad de las pinturas de paredes y techos, trabajo de más de 150 artesanos y de Kamal-ol-Molk pintor de la corte en aquel momento.
Aparte de por las pinturas, la casa Boroujerdi es famosa por su fantástico badgir construido con adobe y piedra. Sin embargo no se puede ascender al tejado para verlo de cerca tal y como se ve en las fotos de propaganda. Tuvimos que conformarnos con observarlo desde una de las esquinas del patio accesorio, una pequeña decepción.
La casa Boroujerdi tiene dos patios. El menor ubicado en un lateral, tenía un aspecto casi abandonado cuando estuvimos, aunque es desde donde se ve el bonito badgir. El patio mayor es el primero que encontramos al entrar, con una fuente central y la zona noble de la casa al fondo.
» La casa Boroujerdi es de pago y NO entra en el ticket combinado.
» Es quizás la casa que menos nos gustó, y si bien las pinturas son muy buenas y están muy bien conservadas, la visita es un poco corta.
Khan-e Tabatabei o casa Tabatabei
La enorme casa Tabatabei de 4730 m2, perteneció a un rico comerciante de alfombras y dispone de cuatro grandes patios con decenas de habitaciones a su alrededor, la mayoría desiertas pero con grabados en sus paredes.
Lo que más nos llamó la atención de la casa Tabatabei es el gran tamaño de la mansión y el detalle de algunas de las habitaciones, en particular una dependencia en la que cinco puertas de madera y cristal dejan filtrar la luz de la mañana formando reflejos de colores en el suelo de la habitación.
»La casa Tabatabei es de pago y está incluida en el ticket combinado junto con la casa Abbsian y los baños del sultan Amir. Puedes comprarlo en el primero que visites.
Khan-e Abbasian o casa Abbasian
La casa Abbasian no tiene ni el tamaño de la Tabatabei ni los detalles de la casa Boroujerdi, sin embargo también es recomendable visitarla para disfrutar de sus patios y decenas de habitaciones con finos estucos y grabados en escayola. Además el hecho de que los grupos organizados no siempre incluyan esta visita, hizo que nos encontrásemos mucha menos gente y quizás por ello nos gustó más.
» La casa Abbasian es de pago y está incluida en el ticket combinado junto con la casa Tabatabei y los baños del sultan Amir.